Tras el viaje

La idea de la Selva Negra ya la teníamos en mente desde hacía varios años, al ser una zona pequeña hay que combinarla con más lugares, normalmente se suele visitar la región de la Alsacia francesa que está muy cerca, pero nosotros la descartamos por el calor, también barajamos Füssen por su impresionante Neuschwanstein (Castillo del Rey Loco); pero al final nos inclinamos por la que hicimos, y tras la vuelta pensamos que estuvo bien, no visitamos gran cantidad de lugares, preferimos darnos un poco más de tiempo y poder disfrutarlos.

Seguramente si no hubiéramos ido al concierto de Bruce Springsteen en Milán hubiéramos llegado a alguna ciudad de Alemania, pero tampoco estuvo mal llegar a Italia, cruzar Suiza son unas 5 horas, eso sí, tienes que pagar la viñeta, pero el coche de alquiler sale muy similar de precio en los dos países.

Comenzar el viaje por Italia, visitando la desconocida BÉRGAMO fue todo un acierto, una ciudad muy bonita con un centro histórico pequeño, pero que disfrutamos mucho.


Del LAGO CONSTANZA en realidad visitamos poco, tan sólo Lindau, Meersburg y Friedrichshafen, pero fue suficiente para que la zona nos encantara, los pueblecillos son pequeños y muy bonitos, y que estén todos comunicados por barco, hace que todo sea muy bonito y muy relajante.



La ciudad de ROTHENBURG OB DER TAUBER yo creo que debe ser una de las más bonitas de Alemania, con un casco histórico precioso y muy bien conservado; es una ciudad que tenía muchas ganas de visitar y no me defraudó en absoluto.



Sin embargo HEIDELBERG no nos gustó tanto, lo bonito que tiene es el castillo, pero más que el castillo en sí, es su imagen desde el otro lado del río; pero sí que merece la pena una visita, aunque sea breve.


La SELVA NEGRA tiene infinidad de rincones, cataratas y pueblecillos preciosos, nosotros visitamos lo que consideramos que nos podía gustar más, pero hay mucho más que ver.



Las cataratas que más nos gustaron fueron las de TRIBERG, tienen una gran caída de agua; aunque las de ALLERHEILIGEN tampoco estuvieron mal.


De los pueblecillos, sin duda GENGENBACH fue el que más nos gustó, y además al estar alojados allí, pudimos disfrutarlo al atardecer tranquilamente; también merece la pena SCHILTACH.


Su capital FRIBURGO no está mal, su centro es muy pequeño pero después de ver los pueblecillos que habíamos visto, pues sabe a poco; mejor visitarla antes de la ruta por la Selva Negra.


Lo que fue una pena, es que con las cervezas tan buenas que tienen y a pesar del calor que hacía, apenas las sirvan frías.



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